Biografía
Nació en Vimieiro, siendo el
único hijo varón de cinco de una modesta familia de campesinos, en el año 1905
entró como seminarista en Viseu; en aquél tiempo era conocido despectivamente
como "el hijo de Manholas". Dándose cuenta de su falta de vocación se
mudó a Coímbra para estudiar Derecho (1910). En 1914 obtuvo el título de
bachiller en Derecho y en 1916 asistente de Ciencias Económicas. Asumió la
regencia de la cátedra de Economía Política y Finanzas en 1917 por invitación
del profesor José Alberto dos Reis, antes de doctorarse en 1918.
En Coímbra
materializa su inclinación por la política en el Centro Académico de la
Democracia Cristiana, donde hace varios amigos, sin embargo era considerado un
alumno de choques entre los seguidores de la Monarquía y de la República.
Combate el anticlericalismo de la Primera República a través de artículos de
opinión que escribe para periódicos católicos. Acompaña a Cerejeira en
palestras y debates.
Sus opiniones y contactos en el
Centro Académico de la Democracia Cristiana le llevarán en 1921 a presentarse
como diputado al Parlamento por Guimarães. Tras ser elegido, y sin encontrar en
ello motivación alguna, regresó a la Universidad pasados dos días. Se mantiene
ahí hasta 1926, escribiendo y dando conferencias.
Con la crisis económica y la
agitación política de la I República (que se prolongó incluso después de la
Revolución Portuguesa de 1926), la dictadura militar llama a Salazar en junio
de 1926 para asumir la cartera de Ministro de Finanzas. Pasados trece días
Salazar renuncia al cargo y vuelve a su cátedra en la Universidad de Coímbra
por no habérsele satisfecho las condiciones que consideraba indispensables para
su ejercicio.
En 1928, tras la elección del
presidente António Carmona y en vista del fracaso de su antecesor en conseguir
un abultado préstamo externo con vistas al equilibrio de las cuentas públicas,
Salazar vuelve a asumir la cartera. De inmediato Oliveira Salazar exigió
controlar los gastos e ingresos de todos los ministerios. Satisfecha la
exigencia, impuso una fuerte austeridad y riguroso control de las cuentas,
consiguiendo un superávit en las finanzas públicas tras el ejercicio económico
de 1928-29, y esforzándose en mantener un presupuesto equilibrado, al extremo
de recortar severamente los gastos del Estado.
En la prensa que le era
favorable, Salazar sería muchas veces retratado como salvador de la patria
debido a que, tras muchos años de dificultades, la economía portuguesa no
sufría de déficit presupuestario desde 1928. Este hecho, considerado una proeza
por sus contemporáneos, le ganó a a Salazar un gran prestigio, entre las
corrientes de la derecha republicana, de los monárquicos y de los católicos.
Posteriormente, la propaganda y
la manipulación política consolidaban su poder, en tanto Salazar amenazaba con
su renuncia en caso la derecha portuguesa sugiriese limitar sus poderes. Para
esas fechas, la economía portuguesa había dejado atrás el déficit y los
gravosos empréstitos contratados en el extranjero, y por ese solo motivo las
fuerzas armadas y la élite financiera apoyaban a Salazar, por miedo a sufrir
nuevamente el caos financiero de la Primera República Portuguesa. Inclusive el
Presidente de la República, el general Carmona, le consultaba a Salazar antes
de cada remodelación ministerial.
Mientras la oposición democrática
se desvanecía en sucesivas pugnas internas sin éxito, se procuraba dar rumbo a
la Revolución Nacional impuesta por la dictadura militar surgida desde 1926.
Salazar, rechazando el regreso al parlamentarismo de la I República,
proporciona la solución: crea la Unión Nacional, un movimiento político
nacional (en la práctica un partido único) aglutinador de todos cuantos
quisieran "servir a la patria".
En 1932, tras la dimisión de
varios Primeros Ministros y ya con una consolidada figura en el gobierno,
Salazar asume como Primer Ministro de Portugal. Ese año se lanza el proyecto
para crear una nueva constitución, y Salazar llamaría a un grupo de connotados
profesores universitarios para crearla, modelando una constitución fuertemente
autoritaria y centrada en los poderes del primer ministro. En 1933 luego de ser
plebiscitar la Constitución, ésta se aprueba y entra en vigor, naciendo así el
Estado Novo y también el Salazarismo.
Os dejo una de las mayores revoluciones ocurridas en Portugal.
Jajajaja Gran blog me ha hecho reir muchisimo! ;)
ResponderEliminarCon dos cojones!!
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